En 1965 —año de redacción de Las calles— España era un país que comenzaba a salir de una oscura y larga posguerra para entrar en una primera etapa de confort auspiciada por el turismo y las divisas. Como ocurre en la actualidad, ese bienestar que comenzaba a penetrar en nuestro país, sobre todo en las grandes ciudades, no llegaba a todos por igual.
El protagonista y narrador de esta obra es uno de esos hombres a los que la seguridad económica todavía no ha alcanzado. No es que no tenga un trabajo, es que no tiene un buen sueldo. Su empleo le permite sólo, y a duras penas, sobrevivir. Como no puede entrar a un café, ir mucho al cine o comprar libros, pasea por la ciudad.
La relación con la ciudad y con sus habitantes, pero también las relaciones laborales en un entorno de precariedad y pobreza económica, son el tema fundamental de esta novela que por su carácter crítico con la sociedad y su magnífico empleo de lenguaje puede leerse como una obra completamente actual.
Las calles, publicada por primera vez en 1968 en la revista Cuadernos Hispanoamericanos, fue la primera obra narrativa de Félix Grande. Como ha señalado el novelista Luis Landero: «En Las calles está ya anunciado lo esencial del mundo literario de Félix Grande. Es una obra que emociona por su densidad existencial».
Félix Grande (Mérida, 1937 – Madrid, 2014) fue poeta, narrador, ensayista y flamencólogo. Considerado como uno de los grandes renovadores de la poesía española del siglo XX, obtuvo entre otros premios el Nacional de Poesía en 1978 por Las rubáiyatas de Horacio Martín (Lumen, 1978), el Nacional de Flamencología en 1980 y el Nacional de las Letras Españolas en 2004, además del premio Casa de las Américas en 1967 por otra de sus grandes obras poéticas Blanco spirituals. En total publicó más de 40 libros y cientos de artículos en periódicos y revistas.